Jesús dijo: Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá. Y todo aquel que vive y cree en mí, no morirá eternamente. Juan 11:25-26 ¿Crees esto?

”Pero si se predica de Cristo que resucitó de los muertos, ¿cómo dicen algunos entre vosotros que no hay resurrección de muertos? Porque si no hay resurrección de muertos, tampoco Cristo resucitó. Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana es también vuestra fe. Y somos hallados falsos testigos de Dios; porque hemos testificado de Dios que él resucitó a Cristo, al cual no resucitó, si en verdad los muertos no resucitan. Porque si los muertos no resucitan, tampoco Cristo resucitó; y si Cristo no resucitó, vuestra fe es vana; aún estáis en vuestros pecados. Entonces también los que durmieron en Cristo perecieron.“. 1 Corintios 15:12-18.

De acuerdo con el diccionario, resurrección es volver a la vida que se tenía antes de la muerte, por eso se dice que resucitar es revivir.  La celebración del Domingo de resurrección es importante porque creemos esa resurrección y estamos aquí por un propósito eterno gracias a la fe que ejercemos; pero si no creyéramos, nuestra fe sería vana. Si no creyéramos en la resurrección de Cristo todavía estamos en pecado.  ¿Qué provoca el poder de la resurrección en nuestra vida? 1. esperanza viva y herencia que Jesús reservó para todos.  Aprovechemos Su sacrificio, pues de lo contrario nos volvemos indiferentes y caeríamos en el error de menospreciarlo. 2. transformación. La obra que Dios inició en cada uno de nosotros está perfeccionándose cada día hasta Su venida. La resurrección venció a la muerte y se convirtió en victoria.  También provoca vida porque destruye al pecado para que no le sirvamos más.  Cuando renacemos en Cristo estamos bajo Su gracia, no bajo la ley. Ahora veamos:

I. Evidencias de la Resurrección

 • Primero, Cristo predijo su resurrección. La Biblia registra: “Desde entonces comenzó Jesús a advertir a sus discípulos que tenía que ir a Jerusalén y sufrir muchas cosas … y que era necesario que lo mataran y que al tercer día resucitara” (Mateo 16:21). Aunque sus seguidores no entendieron lo que les estaba diciendo en ese momento, recordaron Sus palabras y las grabaron.

 • Segundo, Jesús hizo numerosas apariciones a sus seguidores. Él consoló a los dolientes fuera de su tumba el domingo por la mañana. En el camino a Emaús, explicó cosas acerca del Sí mismo del Antiguo Testamento. Más tarde, comió en su presencia y los invitó a tocarlo. La Escritura registra que Jesús fue visto por más de 500 al mismo tiempo. Algunos pueden argumentar que algunas personas podrían haber aceptado un engaño, pero ¿cómo se puede explicar la colaboración de 500 personas?

 • Tercero, la fe implacable de los discípulos me convence de la Resurrección. Aquellos discípulos que una vez tuvieron tanto miedo de desertar de su Señor ahora proclamaron valientemente esta noticia, arriesgando sus vidas para predicar. Su comportamiento audaz y valiente no tiene sentido a menos que supieran con absoluta certeza que Jesús había resucitado de entre los muertos.

 • Cuarto, el crecimiento de la iglesia cristiana confirma la Resurrección. El primer sermón de Pedro, que trató sobre la resurrección de Cristo, incitó a la gente a recibirlo como su Salvador viviente. Lucas registra los resultados emocionantes: “Ese día se añadieron unas tres mil almas” (Hechos 2:41). Y ese grupo de creyentes se ha multiplicado hasta ahora y llega a todo el mundo. Hoy, hay cientos de millones de creyentes.

 • Finalmente, el testimonio de cientos de millones de vidas transformadas a través de los siglos muestra el poder de la Resurrección. Muchos han sido liberados de adicciones. Los indigentes y desesperanzados han encontrado esperanza. Matrimonios rotos han sido restaurados. La prueba más concluyente para la resurrección de Jesucristo es que Él está viviendo dentro de los creyentes hoy, en toda su vida resucitada y su poder transformador.                                                         

II. El Significado de la Resurrección

La Resurrección confirma que Jesús es quien dijo ser. Consideremos la magnitud de este evento:

 • La Resurrección demostró que Cristo era divino. El hecho de que Jesucristo murió en la cruz no prueba en sí mismo que Él es Dios. Jesús demostró su deidad cumpliendo las profecías de su muerte y por su regreso de la tumba. La Biblia declara que “y quedó demostrado que era el Hijo de Dios cuando fue resucitado de los muertos mediante el poder del Espíritu Santo” (Romanos 1: 4).

 •  La Resurrección demostró el poder de Cristo para perdonar el pecado. La Biblia afirma: “Si Cristo no resucitó, tu fe no tiene valor, aún estás en tus pecados” (1 Corintios 15:17). Al resucitar de los muertos, Jesús demostró su autoridad y poder para romper los lazos del pecado y asegurar el perdón y la vida eterna a todos los que aceptan su regalo de salvación.

 • La Resurrección reveló el poder de Cristo sobre la muerte. La Biblia registra: “Sabemos que Jesucristo resucitó, y que nunca más volverá a morir, pues la muerte ya no tiene poder sobre Él” (Romanos 6: 9). La Resurrección también aseguró nuestra victoria sobre la muerte y “nos levantó de los muertos junto con Cristo y nos sentó con él en los lugares celestiales, porque estamos unidos a Cristo Jesús” (Efesios 2: 6).

 • La Resurrección derrotó al enemigo de Dios. Desde el momento de su rebelión original hasta el día de la Cruz, el diablo luchó cruelmente y astutamente para derrocar al reino de Dios. Satanás debió haber pensado que había dado el golpe final y decisivo en esta guerra milenaria. Pero este fue el error de cálculo más grave del diablo. La cruz fue el triunfo del cielo. Y cuando Jesucristo se levantó, el poder del pecado y la muerte quedaron para siempre destrozados. Debido a la Resurrección, los cristianos nunca deben temer a Satanás ni a la muerte nuevamente.                                                                                

Amados hermanos:  Jesús Resucitó y paso días apareciendo en Jerusalen, al menos 500 personas  lo vieron vivo, comieron con él, pasearon con él, le tocaron y le vieron ascender en gloria al cielo para regresar. La resurrección trae gozo. Una alegría que nadie puede quitarte, felicidad y gozo continuo. Por eso la Iglesia creció a miles de personas en un momento, por eso la transformación en el libro de Hechos, por eso la valentia de los discipulos. Cuando los discipulos vieron que el venció a la muerte eso creo una exploción de fe, y gozo. Eran libres del miedo, de la confusión, del dolor, de la angustia, de la ansiedad, de la preocupación, de la tristeza, y de la desesperación. La resurrección de Jesús es un evento central en la fe cristiana que simboliza su victoria sobre el pecado y la muerte. Para los cristianos, la resurrección de Jesús representa la promesa de vida eterna y la esperanza de la redención. Es considerada como la prueba definitiva del poder de Dios y el cumplimiento de las profecías bíblicas. Además, la resurrección de Jesús es vista como un ejemplo de la posibilidad de renovación y transformación espiritual para todos los creyentes. También la resurrección proporciona consuelo y esperanza a los creyentes. En momentos de sufrimiento, dolor o pérdida, la creencia en la resurrección ofrece la promesa de que la vida no termina con la muerte física, sino que continúa en la presencia eterna de Dios. Finalmente  la resurrección inspira a los creyentes a vivir con esperanza, valentía y amor, sabiendo que la muerte no tiene la última palabra, es por eso que la resurrección tiene un impacto transformador en la vida de los seguidores de Jesús. Los cristianos ven la resurrección como un evento que no solo sucedió en el pasado, sino que tiene relevancia y poder en el presente. Gocémonos pues, y tengamos buen ánimo, porque Nuestro Cristo vive, reina, y viene otra vez. Cristo vive. Dios les bendiga